La sequía afecta a los cultivos de Ucrania y Rusia (Fuente: www.world-grain.com)
Fuente: https://www.world-grain.com/articles/20395-dryness-stressing-ukraine-russia-crops
KANSAS CITY, MISSOURI, EE.UU. – Como si la guerra entre Rusia y Ucrania no fuera suficiente, la región ha estado soportando un verano muy seco. El estrés en los cultivos de la región está alcanzando su punto máximo por tercera vez en esta temporada de crecimiento, con temperaturas entre muy cálidas y calurosas y lluvias limitadas. Desde la primavera, la humedad del suelo no ha sido más que marginalmente adecuada. Recientemente, los países balcánicos y el oeste de Ucrania se han sumado a la sequía justo a tiempo para el llenado de los cultivos de verano, lo que aumenta la posibilidad de que se produzcan más pérdidas de producción.
Las precipitaciones desde principios de primavera han sido inferiores a lo normal en la región meridional de Rusia, así como en partes del este de Ucrania y el oeste de Kazajstán. Ha habido algunos episodios de lluvias puntuales, pero no han sido suficientes para mejorar seriamente la producción de la temporada. Ya es bien sabido que la cosecha rusa de trigo de invierno se redujo este año debido a esta sequía y, en parte, a las heladas de finales de temporada. El trigo de invierno, la cebada y la colza se vieron afectados por la primavera, extrañamente seca, y la ola de frío de corta duración.
A partir de ese momento, se produjo un breve periodo de mejor tiempo que ayudó a que los cultivos de primavera se plantaran y tuvieran un comienzo «aceptable». Sin embargo, dos importantes periodos de altas presiones en altura se asentaron en el oeste de Rusia, lo que provocó la interrupción de las precipitaciones oportunas y la evolución de temperaturas más cálidas de lo habitual. Los dos periodos de crestas de altas presiones dominantes encajaron perfectamente en un sesgo meteorológico del pasado en el que los años que comenzaban con El Niño y terminaban con La Niña daban lugar a una escasa producción para al menos una parte del oeste de Rusia, Ucrania y a veces Kazajstán.
La situación este verano no parecía tan mala al principio del periodo vegetativo, ya que unos pocos chubascos consiguieron aparecer con la frecuencia suficiente para satisfacer el desarrollo temprano de los cultivos. El desarrollo y dominio de las altas presiones en el aire provocó periodos más cálidos de lo habitual que aceleraron el secado y provocaron estrés en los cultivos y el ganado, pero la situación nunca pareció durar lo suficiente como para provocar una «crisis» en la producción.
Recientemente se ha producido un tercer episodio de altas presiones en el aire, en el periodo tradicionalmente más cálido del verano, lo que ha provocado temperaturas más elevadas y una menor tolerancia del calor por parte de los cultivos. El calor castigó más el desarrollo de los cultivos debido a las condiciones ya debilitadas de éstos y a la escasa humedad del suelo. El estrés sufrido por los cultivos en esta tercera ronda de tiempo cálido y seco ha sido notablemente mayor, lo que se ha traducido en mayores pérdidas potenciales de rendimiento en la región meridional de Rusia y en el este de Ucrania.
Las dos últimas rachas de tiempo cálido y seco de este verano han ampliado la zona más seca hacia el norte y el oeste, siendo esta última racha de sequía la que ha experimentado una mayor expansión. Partes de la región central de Rusia y de los países balcánicos del sureste de Europa están ahora incluidas en el tiempo más seco y cálido. En el momento de escribir estas líneas, la situación ya duraba unos 10 días y se preveían pocos cambios o ninguno hasta la primera semana completa de septiembre.
Si se verifica esa persistencia del calor y la sequedad, hay pocas posibilidades de que el maíz de secano, la soja, el sorgo, las semillas de girasol, la remolacha azucarera o las patatas producidas en la región escapen a algún impacto negativo. Para muchos cultivos de la región meridional de Rusia, Ucrania occidental y los países balcánicos de Europa, las condiciones más estresantes se han producido a finales del verano, lo que ha limitado el impacto en los recortes de producción, pero se prevén algunas pérdidas.
Los recortes de producción más graves procederán de la mitad oriental de Ucrania y de la región meridional de Rusia, que ya está desgarrada por la guerra y podría no haber producido tan bien de todos modos. Debido a la guerra, el impacto de la sequía en la región puede tener poca repercusión en las expectativas de oferta y demanda mundiales. Esto puede ser especialmente cierto si se tiene en cuenta que India, China, Europa occidental y septentrional y Estados Unidos tienen previsto producir bien este verano. Sin otra zona importante de la producción mundial de cereales y oleaginosas que sufra recortes de producción, el problema del suroeste asiático y el sureste europeo puede resultar insuficiente para sostener el comercio de productos básicos. La percepción del mercado es que todo va bien en la oferta mundial de cereales y oleaginosas.
De cara al futuro
¿Y qué hay del futuro? Muchos operadores y analistas se centran en Australia, Brasil y Argentina en busca de una señal de cambio en la oferta de cereales y oleaginosas a medida que nos acercamos a 2025. World Weather, Inc. no prevé unas perspectivas de producción pesimistas.
El trigo de invierno, la cebada y la colza de Australia están bien establecidos en la mayor parte del sur y preparados para comenzar favorablemente el crecimiento primaveral. Queensland es el único estado con problemas de sequía, y últimamente ha hecho mucho calor. Sin embargo, las perspectivas apuntan a un cambio: las lluvias se reanudarán a mediados o finales de septiembre, a tiempo para los cultivos de invierno y para la siembra de los de verano.
Argentina también está bastante seca en el centro-oeste y el noroeste. También en este país se espera una mejora de las precipitaciones en la segunda mitad de septiembre y en octubre, lo que debería mejorar las condiciones para los cultivos de invierno y para la siembra de los cultivos de verano de principios de temporada.
Algunas agencias de predicción siguen hablando de La Niña, aunque World Weather, Inc. cree que no se desarrollará o que será tan débil que se considerará un fenómeno «no tradicional», lo que eliminará la preocupación por las amenazas de lluvias estivales en Brasil y apoyará unas perspectivas favorables para la producción de 2024-25.
Drew Lerner es meteorólogo agrícola senior de World Weather, Inc. Se puede contactar con él en worldweather@bizkc.rr.com. Los pronósticos y comentarios de World Weather, Inc. relativos a las condiciones meteorológicas presentes, pasadas y futuras incluidos en este informe constituyen la opinión de la corporación a fecha de este informe y están sujetos a cambios sin previo aviso.